EFESIOS 6: 10-11
Uno de los escritos más extraordinarios de la Biblia se encuentra en estos versículos del pasaje que hoy veremos. Nos habla con toda certeza y claridad de, la lucha espiritual a la que todo cristiano es llamado.
Alguien dijo: “Efesios, comienza con las bendiciones espirituales de paz, riqueza y gloria que todo creyente tiene aseguradas en el Cielo y termina en un campo de batalla, donde el cristiano debe librar una dura y diaria lucha contra huestes espirituales de maldad”. Por ello es importante destacar la sinceridad con la que el Apóstol escribe ya que nos dice que estamos llenos de bendiciones pero también que viviremos llenos de luchas.
Nuestra encumbrada posición en Cristo, desatará toda la hostilidad que el enemigo de nuestras almas quiere desplegar con el único fin de poder reconquistar el terreno de nuestra alma, aquello que ha perdido por la obra de Jesucristo en la Cruz.
Esta exhortación de Efesios, nos dejará la idea de que, cada uno de nosotros “podemos alcanzar fortaleza espiritual para ser capaces de enfrentar la lucha que habrá de venir a la vida nuestra, cada día”.
Se destacan en este pasaje tres conceptos:
- La necesidad de FORTALEZA.
- La necesidad de VESTIDO.
- La necesidad de FIRMEZA.
1°) La necesidad de FORTALEZA. El fundamento de esta necesaria solidez espiritual para enfrentar al enemigo de nuestras almas, no está en lo que somos, tenemos, sabemos o podemos sino, en Jesucristo. Cada cristiano es fuerte y avanza creciendo y desarrollando esa fortaleza espiritual en la medida que se vincula a Jesús. La fortaleza está en qué y quién es el Señor y no en qué y quienes somos nosotros. SOMOS ALGO EN ÉL, NO FUERA DE ÉL.
Fortalecerse es “hacerse fuerte en”, en este caso en Jesucristo. Es la misma idea con la que el Apóstol le escribe a los Filipenses (4:13) “Todo lo puedo en Cristo”; “todo lo puedo en Aquel que constantemente me fortalece”. Es como si dijera: “puedo enfrentar todas las cosas, todos los obstáculos, todos los enemigos en la fuerza del Señor que siempre esta sosteniéndome”. Fortalecerse, es estar unidos, pendientes y dependientes del poder del Señor.
2°) La necesidad de VESTIDO. Aquí se describe la importancia de estar vestidos, no para andar a la moda sino, para enfrentar las luchas. Se trata de una vestimenta de características especiales y para necesidades espirituales vestimenta que, nos permite mantenernos en pie frente a los ataques satánicos. Es necesario usar toda esta armadura. No es solo “usar una o dos piezas”, es usar “TODA LA ARMADURA”.
La palabra “armadura” es PANOPLIA, que describe todo el conjunto de las piezas que conforman la armadura.
Esa armadura es de Dios y es Él mismo quién la da a quienes la quieran usar. Dios diseñó esta vestimenta, Dios da esta protección, y de hecho Dios mismo es nuestra protección. (Salmo 46)
3°) La necesidad de FIRMEZA. Junto con el uso de esta vestimenta, Dios nos pide “estar firmes” para poder enfrentar las asechanzas del Diablo, los argumentos y artimañas que nuestro Enemigo usará en contra nuestra. Asechanzas significa literalmente “MÉTODOS”. La metodología del Diablo es múltiple, es grande, tiene innumerables formas de llegar a nuestra vida, doblegar nuestra mente y hacernos caer, ese es su objetivo:
.debilitar nuestra voluntad
.debilitar nuestra fe
.debilitar nuestra confianza en Dios
.debilitar nuestra vida espiritual
El mismo Apóstol declara en 1° Corintios 2:11 “no ignoramos sus maquinaciones, no ignoramos sus malas intenciones”. No estoy seguro que sea tan así; hoy en día para muchos cristianos el Diablo, es un ilustre desconocido por ello es tan fácil ceder y caer ante algunos de sus muchos métodos!!!. Siempre insistirá, nunca dejará de buscarnos pelea, nunca!!! por ello, es fundamental “FORTALECERNOS EN EL SEÑOR Y EN EL PODER DE SU FUERZA”.
Ese PODER (el reconocimiento de Su soberanía) y esa FUERZA (ejercida por su accionar, la manifestación concreta en hechos de ese poder soberano) son las bases y fundamentos sobre los que se debe apoyar y se debe manifestarse y transitar nuestra vida.
Ese es el PODER absoluto de Jesús que tiene y quiere darnos; la victoria que necesitamos para cada hora, cada día, cada lucha, cada conflicto, cada circunstancia adversa en la que podamos estar. Usemos ese poder, no otro.
¿usamos ese poder?
por Pastor Jorge Luis Pérez, Buenos Aires, Argentina 
www.mamasqueoran.com
mamas@cvclavoz.com
Facebook: Mamas Que Oran (Grupo) – asegurate que esté bajo el nombre de Alejandra Zangaro
