“Pablo, siervo de Jesucristo…” Romanos 1:1
Que definición, tan humilde la de Pablo, denominarse siervo (esclavo) de Jesucristo.
En esa época ser un esclavo era algo denigrante, mas aún si eras un ciudadano romano, y Pablo por cierto, lo era.
Por qué Pablo se llama a sí mismo siervo o sirviente entonces?
El decidió, escogió y señaló, estar completamente subordinado y ser totalmente obediente a su Señor.
Cuando alguien tenía un sirviente era porque lo había comprado, pagó un precio por él.
Cuando entendemos esto, como lo hizo Pablo nos resulta algo maravilloso.
Jesús pagó un precio de Sangre por mí y por tí.
Su gracia sin fin nos capacita, para ser siervos, y nuestra obediencia y su amor nos ayuda a realizar la labor que en verdad importa, la que El nos llamó a hacer, predicar el Evangelio a toda criatura.
Cuando entregamos nuestra vida a Jesús (así como Pablo lo hizo) a quien el poder maravilloso del Espíritu Santo lo transformó y Jesús lo llamó para un propósito grande, aumenta nuestra fe que así puede hacerlo también con nosotros.
Zulma Tigani
Una Mama que Ora
Argentina
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“Por mi hijo oraba y el Señor me concedió lo que le pedí” 1Sam 1:27.
No estás sola en la lucha por tus hijos, SENTITE PARTE ¡!!
