Compartiendo en familia, hoy Seguimos con Juan capitulo 1 por la Lic. Lourdes Villarroel

Los primeros discípulos de Jesús

35 Al día siguiente, Juan estaba en el mismo lugar con dos de sus discípulos. 36 Cuando vio que Jesús pasaba por allí, les dijo: «¡Miren, aquí viene el Cordero de Dios!»[d] 37 Al oír eso, los dos discípulos lo siguieron.

38 Jesús se dio vuelta y, al ver que lo seguían, les preguntó qué querían. Ellos le preguntaron:

—¿Dónde vives, Maestro?

39 —Síganme y lo verán —contestó Jesús.

Ellos fueron y vieron dónde vivía Jesús; y como eran casi las cuatro de la tarde, se quedaron con él por el resto del día.

40 Uno de ellos era Andrés, el hermano de Simón Pedro. 41 Lo primero que hizo Andrés fue buscar a su hermano Simón. Cuando lo encontró, le dijo: «¡Hemos encontrado al Mesías, es decir, al Cristo!»

42 Entonces Andrés llevó a Simón a donde estaba Jesús. Cuando Jesús vio a Simón, le dijo: «Tú eres Simón, hijo de Juan, pero ahora te vas a llamar Cefas, es decir, Pedro».[e]

Jesús llama a Felipe y a Natanael
43-44 Al día siguiente, Jesús decidió ir a la región de Galilea. Allí encontró a Felipe, que era de Betsaida, el pueblo donde vivían Andrés y Pedro. Jesús le dijo a Felipe: «Sígueme».

45 Luego Felipe fue a buscar a Natanael, y le dijo:

—Hemos encontrado a aquel de quien Moisés escribió en la Biblia, y del que también hablan los profetas. Es Jesús de Nazaret, el hijo de José.

46 Natanael preguntó:

—¿Acaso puede salir algo bueno de Nazaret?

—Ven y lo verás —contestó Felipe.

47 Cuando Jesús vio que Natanael se acercaba, dijo:

—Aquí viene un verdadero israelita, un hombre realmente sincero.

48 Natanael le preguntó:

—¿Cómo es que me conoces?

Jesús le respondió:

—Me fijé en ti cuando estabas bajo la higuera, antes que Felipe te llamara.

49 Entonces Natanael respondió:

—Maestro, ¡tú eres el Hijo de Dios y el Rey de Israel!

50 Jesús le dijo:

—¿Crees esto sólo porque dije que te vi debajo de la higuera? Pues todavía verás cosas más sorprendentes que éstas.

51 Y luego les dijo a todos: «Les aseguro que ustedes verán el cielo abierto, y verán también a los ángeles de Dios subir y bajar sobre mí, que soy el Hijo del hombre.»

Cuando Jesús vino a  la tierra, derramó una promesa sobre nosotros, «a travez de Jesús los cielos se abrirían»

Experimentar que nuestras oraciones, lleguen al mismo trono de Dios y se abran los cielos. Podemos llegar a tener una comunión plena, esta comunión  se debe conquistar, siendo obedientes como menciona este pasaje:

1.- El que me ama , mi palabra guardará;  y mi padre le amara y vendremos a él, y haremos morada con El. Jn14:23

Madres , cada una de nosotras, podemos tener:
a) Un nivel de comunión con Dios.
Eso dependerá de cuanto la desarrollamos.

b) Podemos tener los cielos abiertos a nuestro favor.

Aprovechemos de todas estas promesas que Jesús nos da.

Si este devociónal ha bendecido tu vida no olvides escribirme y ante todo compártelo.

Con cariño:
Lourdes

ale

mamasqueoram.com 

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2 respuestas a Compartiendo en familia, hoy Seguimos con Juan capitulo 1 por la Lic. Lourdes Villarroel

  1. CECILIA dijo:

    Que bendición tus mensajes recién me he inscrito para orar con ustedes por mis hijos y los del ministerio bendiciones!

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