“Por la mañana hazme saber de tu gran amor, porque en ti he puesto mi confianza.
Señálame el camino que debo seguir, porque a ti elevo mi alma”.Salmo 143:8(NVI)
David al igual que nosotras, tenía dificultades, y seguramente también como nos pasa muchas veces, esperamos que al despertar estas tribulaciones ya hayan pasado.
Él confiaba en Dios, y le pedía que lo guíe, que pudiera andar, caminar, transitar siempre en Su voluntad.
Cuando es Dios quien nos guía entonces, nada está perdido, cuando Jesús está en el control de nuestra vida todo esta bien.
Sí, derramamos lágrimas, nos angustiamos y entristecemos pero, no somos de las que abandonan.
Una vez más abriremos la Biblia y buscaremos las respuestas divinas, para que en las dificultades, que se presentan, tanto en el matrimonio, como la salud, en la relación con los hijos, en la vida financiera o profesional obtengamos la victoria que viene de Jesús.
Querida mamá, hoy es el día, hoy es la “mañana” de la que habla el salmo. Escuchemos la voz del Espíritu Santo y hagamos frente a los desafíos de la vida con coraje y valor.
Digamos como David: “Señor, líbrame de mis enemigos, porque en ti busco refugio. Enséñame a hacer tu voluntad, porque tú eres mi Dios. Que tu buen Espíritu me guíe por un terreno sin obstáculos”. Salmo 143:9-109(NVI)
Bendiciones!!!
Zulma Tigani
Una «Mama que Ora»
Argentina
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“Por mi hijo oraba y el Señor me concedió lo que le pedí” 1Sam 1:27.
No estás sola en la lucha por tus hijos, SENTITE PARTE ¡!!
