SALMO 64: Salmo de David en el cual expresa su inocencia y las maquinaciones del enemigo para destruirlo. Tiene una petición, un lamento pero siempre una alabanza
Al leer los Salmos muchas podemos identificarnos con algún momento de nuestra vida.
En el Salmo 64, si bien hay una queja de David dado a su inocencia y la trama oculta para aniquilarlo, siempre está la seguridad que Dios lo guardará del mal.
“Escucha, oh Dios, la voz de mi queja; protégeme del temor al enemigo. Escóndeme de esa pandilla de impíos, de esa caterva de malhechores. Afilan su lengua como espada y lanzan como flechas palabras ponzoñosas. Emboscados disparan contra el inocente; le tiran sin temor y sin aviso” Salmo 64: 1 al 4 (NVI)
Sabes muy bien que el enemigo siempre trabaja en lo oculto, maquina y busca a otros para hacer alianza en tu contra, infiltrarse en tu familia, en tu trabajo, en tu iglesia, con un fin muy decidido de destrucción.
Fíjate que habla de palabras ponzoñosas que pueden ser de desprestigio, de maldición, de calumnias ¡El enemigo vino a robar, matar y destruir! Y va a usar todas sus artimañas contra ti, ¡Por supuesto que eso produce dolor, Si eres inocente, guardas los mandamientos y el amor de Dios en tu corazón!
“Pero Dios les disparará sus flechas, y sin aviso caerán heridos. Su propia lengua será su ruina, y quien los vea se burlará de ellos.” Salmo 64:7 y 8
Tienes que tener la seguridad de que Dios peleará tu causa y te revelará estrategias contra el enemigo, para que camines en su protección y cuidado.
¡Las palabras tienen poder! las tuyas tienen que ser dirigidas y centradas en el Señor; en queja quizás, porque te produce angustia, pero muy poca ¡Si en clamor y en alabanza!
“La humanidad entera sentirá temor; proclamará las proezas de Dios y meditará en sus obras.”Salmo 64:9
Cuando vean la justicia, el amor y la misericordia sobre ti, muchos entregarán sus corazones al Señor, lo que fue dolor, calumnia, una prueba muy dura se convertirá en un testimonio del poder de Dios sobre tu vida. ¡Todos lo verán!
“Que se regocijen en el Señor los justos; que busquen refugio en él; ¡Que lo alaben todos los de recto corazón!” Salmo 64:10
¡Dios te bendice!
Judith Berlo
Una «Mama Que Ora»
Argenrtina
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“Por mi hijo oraba y el Señor me concedió lo que le pedí” 1Sam 1:27.
No estás sola en la lucha por tus hijos, SENTITE PARTE !!
