En Lucas Capitulo 7:12-16 nos habla de una mujer que estaba atravesando un profundo dolor, la muerte de su único hijo.
La escritura dice: «Llevaban a enterrar a un difunto, hijo único de su madre, la cual era viuda.
13 Y cuando el Señor la vio, se compadeció de ella,
y le dijo: No llores.
14 Y acercándose, tocó el féretro; y los que lo llevaban se detuvieron.
Y dijo: Joven, a ti te digo, levántate.
15 Entonces se incorporó el que había muerto, y comenzó a hablar. Y lo dio a su madre.
Solamente las mamas que sufren ese dolor saben que se siente.
Mi historia se parece a la de este joven, porque cuando Jesus llego a la vida de mi madre yo era una nina, es decir tuve el privilegio de crecer en la casa de Dios, sentí su amor, su protección y vi su provision en mi hogar, y los milagros que el hizo también, pero en todo ese caminar nunca le invite que entrara a mi corazón.
Llego mi juventud, y mi lejanía de Dios se hizo notar, deje de ir a la iglesia y me enoje con Dios. Tal era mi rebeldia que me fui de casa y detrás deje a mama llorando, fueron 9 meses de dolor, y estoy segura que todos los días ella clamo por mi, porque en esos meses Dios me libro de accidentes, droga, peligros, y muerte. Varias veces trate de quitarme la vida, pero algo no me dejaba hacerlo, anduve en lugares donde estuve en peligro, busque malas companias y hacia todo lo posible por destruirme ya que en mi pensamiento de esta forma ella sufriría, y ahora entiendo que esa no era yo, era el maligno que quería derribar la obra que Dios había hecho en mama.
Y al igual que el joven de esta historia; Jesus se acerco a mi cuando estaba muerta en mis pecados, me revelo su amor y me dijo: JOVEN , A TI DIGO LEVANTATE, porque regrese a casa me reconcilie con mama. Y al poco tiempo decidi rendir mi vida a quien tanto me amo, a Jesus. Y resucite a una nueva vida, en la cual Jesucristo es mi razón, y mama no solo recupero a su hija, sino que ahora tiene la certeza de su hija esta en las manos de Dios para siempre.
La viuda de este pasaje no solo representaba a mi madre, nos representa a todas las mamas que muchas veces, nos sentimos desamparadas, abandonadas, poco valoradas, por aquellos quienes dicen amarnos y sufrimos porque estamos enterrando la ultima esperanza en alguien o en algo.
La gran noticia es que Jesus se interesa por ti, por lo que sientes, El se detiene y te mira, y te acompaña en tu dolor, El te dice NO LLORES estoy contigo, se acerca a ti, y toca aquello que esta muerto, aquello que tu amas.
Tal vez hoy estes sufriendo por un hijo que se fue de casa, o se aparto del Senor. O esta en rebeldía, en drogas, en malas companias, y pienses que lo estas perdiendo como pensaba esta viuda, ella estaba llendo a enterrar su ultima esperanza, te digo mama no desmayes, sigue orando, tomate fuerte de Dios porque el es fiel y lo va a traer de vuelta por que Jesus tiene la ultima palabra en tu vida, en la vida de tu hijo, y sobre aquello que este muerto.
JESUS te dice:
CONVERTIRE TU DOLOR EN GOZO,
Y TE CONSOLARE,
TRANSFORMARE TU DOLOR EN ALEGRIA,
Mama recibe nuevas fuerzas, no pierdas la fe, hoy es el dia que tu hijo regresara porque Dios ha prometido salvar tu familia. Yo declaro en el Nombre de Jesus la paz sobre tu casa, tu casa no caera por que esta fundada sobre la roca que es Jesucristo.
Adelante sigue clamando por tus hijos, decretando que ellos serán ensenados por Jehova, que los tiene en su mano y el maligno no lo toca.
Mama bendigo tu vida y establezco que este es el dia de tu milagro.
Compartamos el video «Un hijo apartado»:
«La historia del hijo apartado»:
Rosana Quiroga
Una «Mama que Ora»
