La Palabra de Dios dice que Apolos era alguien que conocía las Escrituras, muy bien, que había sido instruido en el camino del Señor, ferviente de espíritu diligente para las cosas de Dios.
Conocemos gente así en la congregación, gente que predica la Palabra muy bien.
Pero dice que “solo conocía” una parte, o sea debía de aprender el resto que le faltaba, alguien tenia que instruirle en la parte que no sabia.
Me preguntaba ante esta enseñaza de Dios, ¿Cómo se habrá sentido este hombre cuando vinieron a instruirle?
¿Cómo reaccionaria, cuando le tuvieron que proporcionar mas información mediante otra u otras personas que no tenían tantos títulos académicos como el?
¿Seguiría conservando ese fervor, esa humildad, esa sencillez, esa integridad que ya había demostrado?
Las escrituras dicen que si lo hizo y fue de mucho beneficio para otros.
«Y queriendo él pasar a Acaya, los hermanos le animaron, y escribieron a los discípulos que le recibiesen; y llegado él allá, fue de gran provecho a los que por la gracia habían creído» Hechos 18:27
Y si fuéramos nosotr@s?
¿Tenemos el deseo de escuchar y aprender?
Dios siempre nos rodea de personas que nos podrán ayudar en nuestro crecimiento espiritual, y aun si es necesario, traer corrección a nuestras vidas.
Manso es ser enseñable, dirigible, moldeable, corregible.
“Moisés era con mucho el más manso de todos los hombres que había sobre la superficie del suelo. Números 12:3” o sea que se dejaba enseñar y obedecía.
Nunca limitemos el desarrollo de nuestra vida espiritual, por el hecho de no ser enseñables. ¡Hay mucho más que aprender en la vida y en el ministerio!
¿Soy alguien a quien se le puede enseñar? ¿Estoy abiert@ a la corrección? No olvidemos que si no somos personas a las que se les puede instruir y guiar, estaremos tomando una actitud de soberbia y perderemos la oportunidad de aprender.
Debemos tomar la decisión de mantener un espíritu dócil y enseñable. Entonces lograremos ser investidos y dotados para toda buena obra.
Zulma Tigani
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“Por mi hijo oraba y el Señor me concedió lo que le pedí” 1Sam 1:27.
No estás sola en la lucha por tus hijos, SENTITE PARTE ¡!!
gracias por el apoyo que me dan para seguir orando por mi hija apesar de ver que la situacion se pone muy dificil a veces no se que hacer como pedir como interceder